El presidente de Estados Unidos disparó con una dura advertencia al régimen de Kim Jong-un al recibir a su par de Corea del Sur.
«La paciencia estratégica con el régimen de Corea del Norte fracasó. Ha fracasado por muchos años. Francamente, la paciencia se acabó», dijo el presidente Trump durante una ceremonia conjunta con su par Moon en los jardines de la Casa Blanca.
Ya lo había dicho antes su vicepresidente Mike Pence, en una visita a Seúl «La paciencia estratégica fue el enfoque del último gobierno y de antes. Durante más de dos décadas, Estados Unidos y nuestros aliados hemos trabajado para desmantelar pacíficamente el programa nuclear de Corea del Norte y aliviar el sufrimiento de su gente. La era de la paciencia estratégica terminó».
Ante esas declaraciones, el embajador adjunto de Corea del Norte ante la ONU, Kim In-Ryong, sostuvo la advertencia y subió la apuesta: «Si Estados Unidos se atreve a recurrir a una opción militar, la República Popular Democrática de Corea está lista para reaccionar a cualquier tipo de guerra deseada por Estados Unidos».